Ola de violencia desatada en el Callao ya ha dejado 19 muertos [INFORME]

La violencia ha vuelto a apoderarse de las calles de la Provincia Constitucional del Callao, al extremo de que algunos de sus alcaldes ya han solicitado que el gobierno instaure –otra vez– el estado de emergencia. La cifra de muertes también demostraría esta situación pues, en lo que va del año, se han perpetrado ya 19 asesinatos con arma de fuego.

Son tres los principales móviles que han desatado estos crímenes. El primero es la guerra por la venta de drogas, le sigue el tráfico de terrenos y, finalmente, las disputas por las obras de construcción civil, informó ayer a Perú21 el general Miguel Palomino, jefe de la Región Policial del Callao.

La mayoría de las víctimas son jóvenes que no pasan de los 22 años. El último asesinato, ocurrido la madrugada de ayer, fue el de Eder Josué Zapata Davis (22) en la cuadra 4 del jirón Cusco, en la urbanización Chacaritas, cerca de su vivienda.

Según contaron los testigos, el joven fue interceptado por un sujeto que bajó de un auto negro y le disparó seis tiros, dos en la cabeza. El autor del crimen tampoco pasaba de los 22 años.

Zapata Davis, al igual que otras víctimas, registraba denuncias policiales por el presunto delito de tráfico ilícito de drogas.

Este crimen ocurrió a pocas horas de que otro joven fuera asesinado de nueve balazos en el Cercado del Callao y otras tres personas resultaran heridas de bala en medio de un feroz ataque.

EN EMERGENCIA

Cabe recordar que la violencia en el primer puerto tuvo mayor fuerza en 2015 con la aparición de grandes mafias de narcotraficantes que se mataban por el manejo del ilegal negocio. Esto hizo que, en diciembre de ese año, el entonces presidente de la República, Ollanta Humala, instaurara el estado de emergencia en el Callao.

La cifra de homicidios en 2015 llegó a 110 casos. En 2016, en pleno estado de emergencia, los asesinatos no cesaron y llegaron a 77 casos. El año pasado aumentaron a 83 y, en lo que va de este año, ya son 19, según las estadísticas de la Región Policial del Callao.

El general Palomino informó que “la mayoría de los homicidios están vinculados a la microcomercialización de drogas y asumimos que es la rivalidad entre bandas. No lo podemos asegurar aún fehacientemente, pero es la hipótesis que manejamos”.

Con relación a los asesinatos en Ventanilla, sostuvo que “la rivalidad es por tierras. Lo que buscan en el fondo es el dinero mal habido. Lo mismo en el sicariato por dominar, por eliminar al rival. Al final todo es por el dinero”.

El oficial manifestó que el problema de la criminalidad en el Callao viene de años y se da de generación en generación. “Los hijos, nietos, tienen ese modelo (padres delincuentes, vendedores de droga). Ellos creen que eso es correcto. Asumen en su conciencia que el rol del padre tiene que seguirlo el hijo. Si nosotros no intervenimos, ese va a ser su futuro. Están en un ciclo vicioso, generación tras generación. Hay que cambiar”, refirió.

El general explicó que la mayoría de los adolescentes infractores intervenidos, así como los jóvenes involucrados en diferentes delitos, vienen de familias disfuncionales.

Dijo que esto sucede, principalmente, en el caso de los menores infractores involucrados en hechos de sicariato. “Los niños se desarrollan y crecen en la calle. Aprenden las costumbres de la calle. ¿Quién es el profesor de ese niño? La calle. Qué podemos esperar”, sostuvo Palomino.

Indicó que la educación es uno de los argumentos más importantes para cambiar esta realidad. “Tenemos que incidir un poco más en la escuela y en la formación de valores”, manifestó.

Sostuvo que para luchar contra la violencia en el primer puerto se ha instaurado el programa Barrio Seguro en la zona de Sarita Colonia (cerca del penal), una de las más peligrosas, donde ya se ha comenzado a ver los resultados.

Asimismo, anunció que –para este año– se tiene previsto llevar adelante este beneficioso programa en otros dos sectores chalacos de alta peligrosidad.

DATOS:

* El burgomaestre de Ventanilla, Omar Marcos, el pasado 13 de enero solicitó al presidente Pedro Pablo Kuczynski que se decrete nuevamente el estado de emergencia en el Callao.

* En ese mismo sentido se pronunció el alcalde de Mi Perú, Reynaldo Encalada.