Los congresistas de Gana Perú parecen incapaces de mostrar una posición institucional de respaldo político al Gobierno que representan frente las violentas protestas en Espinar contra la minera Xstrata Tintaya, las cuales ya cobraron dos vidas.
Mientras un grupo de legisladores oficialistas, con el cusqueño Rubén Coa a la cabeza, exigió la renuncia del jefe del gabinete Óscar Valdés, porque lo acusan de un mal manejo de la convulsión social, otro salió al frente para respaldarlo.
"Deploramos la falta de voluntad para resolver mediante el diálogo los problemas que enfrenta la provincia de Espinar, donde ha predominado el autoritarismo. (Por eso) pedimos con mucha firmeza que el presidente del Consejo de Ministros renuncie de manera inmediata a su cargo", dijo Coa en una conferencia en la sede del Parlamento, en la que estuvo acompañado por sus colegas Hernán de la Torre y Verónika Mendoza.
Sin embargo, minutos después, el vocero de Gana Perú, Fredy Otárola, rechazó el pedido de Coa y compañía y reiteró el respaldo a Valdés. "Ratificamos nuestro pleno y absoluto respaldo a nuestro premier y al Gobierno por las medidas tomadas ante estos hechos de violencia que no provocamos", informó.
Respecto a las declaraciones de los legisladores cusqueños, Otárola aseguró que conversarán con ellos "en su debido momento", no sin antes asegurar, aunque parezca broma, que la bancada es "sólida y fuerte".
DESUBICADOS E INCAPACESEn la oposición, la división del oficialismo frente a la situación en Espinar también generó reacciones.
"Es una falta de madurez de estos desubicados (los congresistas cusqueños) ¿Quiénes son ellos para pedir la renuncia (de Valdés)? No son capaces es de explicar las circunstancias de la inversión minera a la población, son incapaces de llevar el orden", dijo Lourdes Alcorta, de Alianza por el Gran Cambio.