Indignado. Así se mostró Ariel Bracamonte, luego de conocer la votación de los cinco magistrados de la Corte Suprema, que podría abrirle las puertas de la prisión a su hermana Eva.
Personas del entorno del menor de los Bracamonte, quien radica en Estados Unidos, indicaron que este volverá en los próximos días a nuestro país para informarse de cerca sobre el proceso.
También comentaron que se siente sumamente decepcionado de la justicia peruana, pues considera que no se le ha hecho justicia a su madre, la empresaria Myriam Fefer.
"Dios existe. Su justicia no tiene precio ni sufre intimidaciones. Ante él todos respondemos y de él nadie escapa", escribió en su cuenta de Twitter, en clara referencia a lo que viene ocurriendo. Asimismo, lanzó duras críticas a los personajes públicos que han venido apoyando a Eva.
Cabe recordar que, antes de que se produjera el pronunciamiento de la Sala Penal Permanente, Ariel expresó su preocupación por la campaña mediática que había iniciado su hermana.
Según dijo en aquella oportunidad, esta buscaba influir en la decisión de los magistrados.
También manifestó que Eva "es capaz de cualquier cosa con tal de obtener su libertad". Del mismo modo, afirmó que existen indicios para que Liliana Castro sea encarcelada nuevamente por el crimen de Myriam Fefer, ocurrido el 15 de agosto de 2006.