La contratación de serenos, la compra de cámaras de seguridad y radios para enfrentar la inseguridad ciudadana, además del pago de deudas por obras en marcha y otros gastos corren el riesgo de no concretarse por parte de los municipios. La razón: se les reduciría el presupuesto para gastos de capital en el 2017.
Así lo señaló el Comité Ejecutivo Nacional de la Asociación de Municipalidades del Perú (AMPE). Su presidente, Óscar Benavides (alcalde de Ate), refirió que para el 2017 se pretende reducir en menos del 11% el presupuesto para los gobiernos locales.
"Hay un recorte presupuestal y, por eso, los alcaldes están preocupados. Este es un reclamo a nivel nacional porque afectaría la realización de obras", manifestó.
Dijo que un grupo de burgomaestres acudirá hoy a la Comisión de Presupuesto del Congreso a fin de solicitar que se modifique el Proyecto del Presupuesto General de la Nación para el 2017.