Un funcionario de la embajada peruana en Estados Unidos fue acusado de esclavizar a su empleada doméstica, también de origen peruano, durante tres años, desde el 2008 hasta el 2011.
En diálogo con CNN, la trujillana Rosmery Martell dijo que José Raúl Corbera Tenorio, agregado civil de la delegación diplomática en Washington, la obligaba a trabajar más de 19 horas los siete días de la semana. Además, lo acusó de hacerle tocamientos indebidos.
"Trabajaba desde las 5:30 a.m. hasta la medianoche todos los días, me pedía que le hiciera masajes todos los días, hasta en los pies. Él pasaba tocándome las piernas y me pedía que use bikini", afirmó la mujer a la cadena internacional.
Martell recordó que el diplomático la amenazaba con que iba a hacerle daño a su familia cada vez que ella pretendía renunciar. También indicó que su empleador le quitó su pasaporte y le dijo que informaría a Migraciones de su situación legal para que la deporten.
Asimismo, refirió que su jefe le ofreció pagar US$1,500 mensuales, pero solo recibía 300 dólares. La familia de la presunta agraviada recordó que ella, en su visita hecha a nuestro país hace dos años, se quejó de los maltratos de sus empleadores.
RESPUESTASegún ATV, Corbera Tenorio rechazó las imputaciones y aseguró que su esposa y él siempre consideraron "como a una hija" a Martell. Como muestra de un supuesto buen trato, dijo que le regalaron un celular, la llevaron de paseo a Disney World y le pagaron sus vacaciones en el Perú.
Aseguró que la denuncia responde a que, en el 2011, le comunicó a la trujillana que ya no iba a contar con sus servicios debido a su "inaceptable conducta". Dijo que el objetivo de su compatriota es aprovechar este tema y quedarse en EEUU.
POSICIÓN OFICIALPor su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó que ya pidió a la delegación diplomática información del tema para tomar las medidas respectivas.