OMS hace un llamado para que los gobiernos actúen de manera decidida. (Difusión)
OMS hace un llamado para que los gobiernos actúen de manera decidida. (Difusión)

Redacción PERÚ21

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Actualmente, la cifra anual de muertes ligadas al consumo de en el mundo es de 6 millones, sin embargo se prevé que para el 2030 esta cifra aumente a 8 millones de personas, informó la Organización Mundial de la Salud ().

De acuerdo al estudio presentado por la OMS ("La economía, el tabaco y el control del tabaco"), el 80% de estas muertes se producirán en los países de bajos y medianos ingresos, pues los fumadores se concentran en estas naciones.

Así, el organismo hace un llamado para que los gobiernos actúen de manera decidida e intervengan para evitar el consumo de tabaco ya que el costo a largo plazo es enorme, sobre todo para los sistema públicos de salud pues asumen los costos de los tratamientos de los afectados.

Asimismo, el informe insta a los ejecutivos a que inviertan más en campañas de información y prevención, pues queda claro que hay muchas personas que no son conscientes de las consecuencias del tabaquismo:

"Existen políticas públicas e intervenciones efectivas para reducir la demanda de productos de tabaco, la muerte, enfermedad y costes económicos que resultan de su consumo, pero estas intervenciones están inutilizadas".

Entre las más efectivas, pero no suficientemente usadas (según la OMS) están:

  • Imponer altos niveles de impuestos al tabaco
  • Políticas de espacios libres de humo
  • Prohibición de la mercadotecnia del tabaco y
  • Campañas de información, entre otras.

El problema, de acuerdo a la OMS, es que pocos gobiernos usan el dinero recaudado por los impuestos a los productos de tabaco a aplicar otras intervenciones de prevención del consumo.

La OMS estima que en 2013-2014, los impuestos globales al tabaco generaron US$269,000 millones de ingresos para los gobiernos, pero éstos sólo invirtieron US$1,000 millones en el control del tabaquismo.

DATOS

  • El documento también resalta que hay una gran posibilidad de que el objetivo de reducir en 30% el consumo de tabaco para el 2025 no se logrará alcanzar.
  • La OMS remarca que el control del tabaco no perjudica a las economías, dado que el número de empleos de la industria tabaquera se ha reducido en los últimos años por las innovaciones tecnológicas, a la globalización y a las privatizaciones, y no por la lucha contra la adicción.

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