Padres primerizos: ¿qué cuidados debe tener el recién nacido?

“El bebé desde que nace, se comunica y está presto al contacto y experiencias que nosotros cómo padres debemos proveer. Desde la Fundación Baltazar y Nicolás, recomendamos informarnos, dado que hoy tenemos más evidencia que antes sobre el impacto de la crianza en el desarrollo humano”, indica Rommy Ríos, gerente de la Fundación Baltazar y Nicolás.

La especialista nos brinda algunas recomendaciones que debemos tener en cuenta sobre los cuidados en los primeros días de vida de niñas y niños:

Los bebés se sienten seguros cuando sus padres están presentes por eso se recomienda aprender a observarlos, identificar que nos quieren comunicar (sueño, hambre u otro), interpretar adecuadamente estas señales y atenderlas oportunamente y con cariño.

Esto es indispensable para lograr el vínculo entre madre-padre-hijo, permitiendo el mejor desarrollo de sus emociones y otras habilidades.

Indispensable acudir a los controles de salud que se realizan a los 7, 14 y 21 días de nacido, el famoso “Control de Niño Sano” es básico para ir monitoreando la adaptación del bebé y que tan bien estamos haciendo nuestros primeros cuidados. Es un espacio importante de aprendizaje con el profesional de salud.

Desde la Fundación ByN, el objetivo de los especialistas en crianza es acompañarlos y brindarles el asesoramiento para que madres y padres se sientan más seguros en estos primeros días con su bebé, además de ir brindando pautas.

Diversos estudios demuestran que la leche materna proporcionada como alimento exclusivo de los bebés recién nacidos hasta los 6 meses de edad, trae múltiples beneficios para el bebé, la madre y la familia.

Conforme lo señala la Organización Mundial de la Salud, la leche materna es el alimento que contiene todos los nutrientes y todos los líquidos que el bebé necesita en esta etapa de vida; además de proporcionar beneficios emocionales y psicológicos tanto al bebé como a la madre.

La higiene en los primeros días es necesaria, a pesar que muchas mamás y papás puedan pensar que con tanto frío, debe evitarse. La higiene del recién nacido debe ser adecuada, además de ser un momento agradable, crear el hábito y ser un espacio propicio para compartir con el bebé.

Para hacerlo con cuidado debe realizarse evitando corrientes de aire, usando agua templada, jabón neutro, enjuagar bien y luego secarlo de manera suave y abrigarlo prontamente.

El llanto es una forma de comunicarse de tu bebé, no es una forma de manipularte, ni fastidiarte. Resulta siendo la expresión de una necesidad o reacción frente a algo que puedan sentir, necesitar o tener, por lo que es importante que madres y padres observen bien a los niños e identifiquen las señales previas al llanto, a fin de evitar que los niveles de estrés del bebé aumenten y exista una explosión de llanto incontrolable.