El alcalde de Quito, Santiago Guarderas, aseguró el martes que a la ciudad le quedan alimentos en los mercados para tres o cuatro días y advirtió que está cerca de una situación crítica a nivel sanitario porque no se ha podido recoger la basura debido a las violentas protestas de los indígenas para exigir al gobierno ecuatoriano la reducción del precio de la gasolina, entre otras demandas.