Indonesia: Estudiante peruano de Harvard muere y familiares denuncian discriminación racial y transfobia

Ventocilla, un hombre transgénero y destacado activista por los derechos de las personas trans, fue declarado muerto cinco días después de ser detenido por presunta posesión de drogas a su llegada a Bali, donde viajaba de vacaciones de luna de miel con Sebastián Marallano.

Su familia alega que fue arrestado en un “acto de discriminación racial y transfobia”, privado de los derechos básicos y sometido a violencia policial mientras los miembros de la familia y los abogados no sabían sobre su condición.

Ventocilla fue miembro fundador de la organización peruana de defensa de los derechos trans Diversidades Trans Masculinas. En la Escuela Kennedy de Harvard, estaba cursando una maestría en Administración Pública en Desarrollo Internacional como miembro de la Clase de 2023 de la escuela.

En un comunicado difundido este martes, las familias de Ventocilla y su cónyuge, Sebastián Marallano, hicieron un llamado a la “justicia peruana para que investigue adecuadamente las violaciones de derechos humanos de Rodrigo y Sebastián y garantice verdad, justicia y reparación”.

El decano de la Escuela Kennedy de Harvard, Douglas W. Elmendorf, dijo en un comunicado el martes por la noche que la escuela “apoya el llamado de la familia para una investigación inmediata y exhaustiva y para la divulgación pública de toda la información relevante”, según The Harvard Crimson.

“La declaración de la familia de Rodrigo plantea preguntas muy serias que merecen respuestas claras y precisas”, escribió Elmendorf.

La policía de Bali inició una investigación sobre su muerte, según Bali Sun, una publicación en inglés de la isla, pero no está claro cuál es el enfoque de la investigación o si los resultados se harán públicos.

Stefanus Satake Bayu Setianto, jefe de relaciones públicas de la Policía de Bali, dijo previamente al medio de noticias indonesio detikBali que Ventocilla murió después de consumir drogas no incautadas el 8 de agosto mientras estaba bajo custodia policial. (Ventocilla fue identificado en los informes de los medios locales por las iniciales VVRDP).

“La causa de la muerte es una falla completa de la función corporal que provoca un deterioro de la función renal y del hígado y del sistema nervioso en el cerebro del paciente”, dijo Stefanus Satake Bayu Setianto, según una traducción de su declaración a detikBali.

Pero en su declaración del martes, la familia de Ventocilla puso en duda la explicación de la policía y escribió que “no sabemos las verdaderas causas de su muerte” porque “las autoridades indonesias no han permitido” una autopsia independiente.

Las autoridades llevaron inicialmente a Ventocilla al Hospital Bhayangkara después de experimentar dolor de estómago y vómitos, según el medio de noticias indonesio Radar Bali. Después de que su condición se deterioró, fue transportado al Hospital General Central de Sanglah, donde murió el 11 de agosto alrededor de las 3:10 p. m. hora local, según Radar Bali.

La familia de Ventocilla dijo en el comunicado que las autoridades de Bali no fueron transparentes sobre su condición.

“La policía de Indonesia obstruyó en todo momento el acceso al hospital a los abogados contratados por la familia, así como a los estudiantes de Harvard que acudieron en su ayuda”, escribió la familia.

Ventocilla fue detenido el 6 de agosto al llegar al Aeropuerto Internacional I Gusti Ngurah Rai en Denpasar por posesión de un molinillo de hierbas, según la Policía de Bali y una publicación de Facebook de Diversidades Trans Masculinas. La policía de Bali también dijo que las autoridades encontraron otros artículos sospechosos de contener marihuana y dos pastillas en el equipaje de Ventocilla, según Radar Bali.

La familia de Ventocilla escribió en el comunicado del martes que fue arrestado por poseer medicamentos recetados que usaba como medicamento para la salud mental. Ventocilla y Marallano, su cónyuge, fueron privados de “derechos humanos vitales como la salud, la libertad, el acceso a la defensa jurídica”, escribió la familia en el comunicado.

Marallano llegó a Bali en un vuelo separado y fue detenido por la policía sin cargos después de intentar ayudar a Ventocilla, según la declaración de la familia, que no fue firmada por miembros individuales.

Marallano también fue hospitalizado posteriormente días después de ser detenido por la policía, según el comunicado de la familia.

La policía de Bali exigió “sumas exorbitantes de dinero” que llegaron hasta los 200.000 dólares para liberar a Ventocilla y Marallano, según el comunicado de la familia.

La familia de Ventocilla también apuntó a los servicios consulares peruanos en Indonesia, que dijeron “no se presentaron a brindar apoyo” hasta que la familia recibió la noticia de la muerte de Ventocilla.

“La actuación del consulado fue tardía, negligente y obstaculizó el pedido de ayuda de la familia cuando Rodrigo aún estaba vivo”, dice el comunicado de la familia.

La familia instó a la Cancillería peruana a “asumir su responsabilidad por el descuido de sus funciones” y a investigar “las acciones y omisiones” de Julio Eduardo Tenorio Pereyra, jefe de los servicios consulares de la Embajada de Perú en Indonesia.

“Nada nos devolverá a Rodrigo ni la integridad de Sebastián, sin embargo, nuestro reclamo de justicia y verdad persigue también el objetivo de mejorar la calidad del servicio de asistencia a nuestros conciudadanos en el exterior sin preferencias de clase, género, etnia u otras“, escribió la familia en el comunicado.

La embajada peruana en Indonesia y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú no respondieron a las solicitudes de comentarios sobre las acusaciones de la familia este martes.

Elmendorf, el decano de la Escuela Kennedy de Harvard, dijo el martes que la escuela recibió la declaración de la familia de Ventocilla describiendo “circunstancias extremadamente perturbadoras que rodearon la muerte de Rodrigo”.

Rodrigo se desempeñó como asesor del director ejecutivo del Proyecto Escuelas Bicentenario en Lima, Perú, que fue creado para cerrar las brechas de infraestructura educativa y promover escuelas de mayor calidad.

Anteriormente, se desempeñó como especialista en presupuesto público del Ministerio de Economía y Finanzas del Perú. Rodrigo recibió su licenciatura en economía de la Pontificia Universidad Católica del Perú.