Muchos fanáticos de Scarlett Johansson se quedaron con las ganas de ver a la bella actriz en un comercial para el Super Bowl, la gran final del fútbol americano, pues este fue censurado.
La estrella de Hollywood era la estrella del spot de la firma Sodastream, la cual pagó casi US$4 millones para estar presente en el gran evento deportivo.
En el anuncio, una sensual Johansson dice "lo siento Coca-Cola y Pepsi" tras probar el aparato estrella de la mencionada empresa, con el que se puede crear gaseosa casera con el sabor que uno prefiera.
Según medios estadounidenses, la cadena Fox levantó el comercial para evitarse problemas con los dos gigantes de las bebidas gaseosas y que son anunciantes de peso en el Super Bowl.
Por otra parte, Sodastream –cuyo origen es israelí– tendría sus plantas en Cisjordania, con lo que se ahorraría alquileres por estar en territorio ocupado y cuya localización "impide la continuidad de un futuro Estado palestino", según el movimiento BDS, que critica estas ocupaciones.
La final de la edición 48 del Super Bowl se jugará este domingo 2 de febrero entre los Denver Broncos y los Seattle Seahawks. Durante los recesos se podrán ver las mejores publicidades del año en Estados Unidos.