Para continuar el legado de su madre ayudando a los niños enfermos de sida, el príncipe Harry estuvo en Lesoto, en el sur de África, con el fin de abrir un nuevo edificio en el Centro Infantil Phelisanong.
Según la prensa británica, el Palacio de Kensington confirmó que el duque de Sussex no realizó un viaje oficial, sino una visita privada por un compromiso personal. También señalaron que su esposa, Meghan Markle, no pudo acompañarlo, pero él estuvo con el embajador de Sentebale, Adam Bidwell.
Durante su recorrido, el príncipe se mostró amable con las personas que lo rodeaban. Incluso, bromeó y jugó con los niños de la zona.
Recordemos que Harry fue por primera vez a Lesoto en 2004 y desarrolló un vínculo estrecho con el joven Mutsu Potsane, quien fue uno de los invitados a su matrimonio.