Redacción PERÚ21

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Phil Rudd, baterista de la banda de rock , fue acusado en de , de proferir amenazas de muerte, así como por posesión de drogas. Él es el último de una larga lista de músicos implicados en homicidios. Aquí te presentamos ocho casos:

  • 1. Phil Rudd: El baterista de AC/DC compareció ante la justicia de Nueva Zelanda, al ser acusado de contratar a un sicario para cometer dos asesinatos y ser autor de continuas amenazas de muerte.
  • 2. Pat Hare: Este exponente del género rockabily grabó en 1954 una versión de I'm Gonna Murder my Baby (Voy asesinar a mi nena). Sería un presagio de lo que sucedería 8 años después, cuando mató a sangre fría a su entonces pareja.
  • 3. Snoop Dogg: El reconocido rapero, también conocido como 'Snoop Lion', fue absuelto de una acusación de asesinato en 1993, cuando su guardaespaldas, McKinley Lee, disparó desde su auto al miembro de una banda rival, llamado Phillip Woldermarian.
  • 4. Varg Vikernes: El líder de la banda de black metal noruego, Burzum, asesinó a puñaladas a su rival de la agrupación Mayhem, Oysten Aarseth. Fue condenado a 21 años de prisión en 1993, pero se dispuso su libertad provisional en 2009.
  • 5. Bård 'Faust' Eithun: Es otro exponente del black metal escandinavo que fue declarado culpable de un homicidio en 1992. El baterista de la banda Emperor confesó haber asesinado a un homosexual a cuchillazos. Fue liberado en 2003.
  • 6. Bertrand Cantat: El cantante de la banda francesa Noir Désir fue acusado en 2003 de golpear de forma brutal a su novia, la actriz Marie Trintignant. Ella murió 7 días después tras permanecer en estado de coma.
  • 7. Jim Gordon: En 1983, el baterista que compuso la canción Layla junto a Eric Clapton, y tocó para los Beach Boys y George Harrison, mató a su madre con un martillo y un cuchillo. Aún sigue en prisión, diagnosticado con esquizofrenia.
  • 8. Frank Rosolino: Este trombonista de jazz no supo cómo afrontar el suicidio de su esposa y le disparó a sus dos hijos, para luego quitarse la vida. Uno de sus hijos falleció, mientras que el otro quedó permanentemente ciego.