El clan Kardashian viajó hasta República Dominicana para filmar un nuevo capítulo de la última temporada del exitoso reality Keeping Up With The Kardashians. La familia entera se hospedó en el complejo Casa de Campo, ubicado en la provincia dominicana de La Romana. ¿El precio? Unos 6 mil dólares la noche.
La presencia de los Kardashians revolucionó la isla caribeña. Las autoridades tuvieron que extremar las medidas de seguridad para que el clan pudiera grabar en paz.
Kim Kardashian se mantuvo recluida la mayor parte del tiempo, aunque hizo algunas apariciones para cumplir con sus obligaciones laborales. Cuando se mostró, lo hizo con un bikini azul al estilo de una 'chica Bond'. Con maquillaje y peinado, la socialité se divirtió en la piscina del complejo junto a su familia.
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