Por: Samantha Aguilar 

Estos últimos años para Joan han sido muy importantes, el reconocimiento a su trabajo como artista plástico le ha llegado como una avalancha, pese a ello, él intenta que nada lo desequilibre. Y sigue con su vida de siempre. Pinta en su taller, en su ciudad Cajamarca, vive cerca al campo con su esposa Sofía (y musa) y sus dos hijos.

“Nunca he pintado en Lima, prefiero hacerlo en Cajamarca, que es el ámbito donde nace todo el tema de mi inspiración. Yo siento que debo estar allá con mi familia. No me he ido de Cajamarca porque es un lugar que me permite despreocuparme de todo, de la fama, del ego, el movimiento de arte de la capital es bonito, pero atrapa y para mí es un poco peligroso. Vengo a Lima solo para nutrirme de su cultura”, declara.

En ‘Fantasía’ su última exposición, Joan ha procurado expresar en sus pinturas todo el misticismo de Cajamarca, con brujos, duendes y seres fantásticos. “En esta obra está expresado todo el folklore de mi tierra, personajes inventados con historias de mi pueblo y las leyendas”.

En el surrealismo andino de la obra Joan hay dos temas presentes y latentes. El primero, la presencia recurrente de la mujer; el otro, los colores, especialmente los neones.

“En ‘Fantasía’ los hombres han tenido un poco más de participación, antes solían aparecer en pareja. El tema de pintar a mujeres parte cuando mi hija fallece (a los tres días de nacida), es por esa razón que centralicé bastante mis sentimientos, exploré mucho la belleza de la mujer, pensando en cómo hubiera sido ella. Sin embargo, las personas que siguen mis obras no son especialmente mujeres, hay familias, madres, jóvenes que a veces tengo la alegría de recibir en mi taller”, añade.

¿Y el color? “No tengo pinturas que sean blanco y negro. He trabajado varias técnicas, pero pienso que me he caracterizado por ser colorista, la gente identifica así mi trabajo, la peculiaridad del neón”

Una razón más para hacer feliz a Joan es la muestra permanente de sus trabajos que se exhibe en el aeropuerto de Cajamarca (da la bienvenida al turista). Mientras tanto en Lima ‘Fantasía’, puede apreciarse en la galería Índigo de San Isidro hasta el 7 de noviembre.