Kate Middleton llamó la atención en la ceremonia de coronación de Carlos III por su vestimenta. No solo porque llevaba consigo un vestido de seda color marfil de Alexander McQueen, sino que también incorporó a sus ropajes un homenaje a su difunta suegra, Diana de Gales.
Kate, para la importante ceremonia, llevó puestos unos pendientes de perlas y diamantes que habían pertenecido antes a Lady Di. Fueron regalos por la firma Collingwood para Diana antes de su boda con el príncipe Carlos en 1981. Son botones de diamantes de los que cuelga una perla en forma de lágrima. Fueron unos de los aretes favoritos de Diana, ya que los llevaba puestos en muchas de sus giras, además de una cena de gala en la embajada británica en los Estados Unidos.
No fue solo Diana quien fue homenajeada en la ceremonia. El vestido crepé de seda elegido por Kate tenía en su diseño flores bordadas en plata que significan las cuatro naciones que conforman el Reino Unido: rosa inglesa, cardo escocés, narciso galés y trébol irlandés. La princesa llevó un tocado Jess Collett x Alexander McQueen para combinar con el vestido. Homenajeó a Isabel II con este tocado.
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No es sorprendente que la princesa tienda a usar tanto la marca de McQueen, puesto que reiteradas veces ha admitido que es una de sus marcas favoritas. La directora creativa de la compañía, Sarah Burton, diseñó su vestido de novia en su boda con el príncipe Guillermo el 29 de abril de 2011.