Emma Watson lanzó una advertencia que decepcionará a sus fanáticos, quienes la siguen desde que encarnó a una brillante bruja en Harry Potter: no se tomará selfies son ellos.
¿La razón? Seguridad y privacidad:
"Para mí, es la diferencia entre ser capaz de tener una vida y no. Si alguien me hace una foto y la publica, en dos segundos coloca una marca de dónde estoy exactamente en un rango de 10 metros. Pueden ver lo que llevo puesto y con quién estoy. Simplemente, no puedo dar esos datos de rastreo".
En lugar de los retratos, Emma Watson ofrece a sus seguidores un autógrafo o tiempo para charlar, en lugar de un selfie. Considera que es un trato justo.
Les advierte: "Me sentaré aquí y responderé a todas las preguntas sobre Harry Potter que tengas, pero no me puedo hacer fotos".
Emma Watson resalta que la popularidad de Harry Potter coloca a los actores de la saga en una situación especial. "No sé cómo explicarlo, pero el fenómeno de la pottermanía pasa a otro nivel. Roza la obsesión", comentó.
La privacidad también es clave en la vida amorosa de Watson. Por lo mismo que ama a su novio, lo cuida y no lo expone a la prensa.
"Me he dado cuenta de que en Hollywood acaban metiendo a tu pareja en la promoción de tu película y lo convierten en parte del espectáculo y del circo. Me sentiría fatal si la persona con la que estoy tuviera que formar parte de un show", argumenta en entrevista con Vanity Fair.