"Estoy escribiendo el libro La historia de una máscara. Cuento mi vida y el paralelo con la actuación". (USI)
"Estoy escribiendo el libro La historia de una máscara. Cuento mi vida y el paralelo con la actuación". (USI)

reflexiona sobre la obra musical 'Billy Elliot' –que se realiza en el – y sale en defensa de cualquier ataque homofóbico con respecto a esta historia de un niño que quiere ser bailarín de ballet.

Cuéntenos de su personaje en el musical Billy Elliot.
Soy ‘Jack Elliot’, el papá de ‘Billy’, un obrero viudo de condición baja debido a los problemas políticos con Margaret Thatcher. La obra está ambientada en los años 80. El personaje pasa por dificultades económicas y tiene que sacar adelante a su familia, entre ellos a ‘Billy’, que quiere bailar ballet.

La obra Billy Elliot fue censurada en Hungría por presuntamente promover la homosexualidad. ¿Qué opina de esto?
Esta obra tiene varias aristas. Por un lado, está el chico que quiere estudiar ballet y el padre se opone, pero también está el conflicto político y económico de los obreros. ‘Billy’ es como un emisario de la libertad y hablar solamente de homosexualidad sería limitarnos. Solo hay una escena del niño, pero nuestra sociedad no es extremista y no se hace apología del homosexualismo.

¿Cuál fue su reacción frente al insulto homofóbico que lanzó un asistente del público hacia uno de los niños de la obra de teatro?
Estoy indignado. Rechazo cualquier acto de violencia y, sobre todo en este caso, que fue violencia psicológica de un adulto mayor a un niño. Esto nos demuestra los manotazos de ahogado de una sociedad cobarde que prefiere mantenerse sorda y atacar a lo aparentemente débil. Felizmente, el niño reaccionó con sabiduría al decir: ‘Es nuestra misión abrir la mente de los espectadores’. Nos hace falta volver a ese corazón de niño que hemos escondido a punta de prejuicios.

¿Cuánto le ha marcado esta puesta en escena?
Lo veo como una terapia. Siento que son espacios de mi árbol genealógico y estoy tratando de sanar heridas a través de mi personaje. Tengo mucha cercanía a este personaje porque es un padre rudo que quiere que sus hijos sean fuertes. Personalmente, tengo la experiencia del poco dinero y de acercarme al arte.

¿Su padre se negó a que estudiara actuación?
No directamente, pero fue difícil, porque tuve que trabajar para pagar mis estudios. Hay muchos prejuicios por el arte y es peor al tratarse de ballet.

Ha interpretado un personaje femenino en la obra La materia de los sueños. ¿Cómo se sintió?
Ojo, no era mujer, sino que en la época de Shakespeare, los hombres hacían papeles de mujeres. Me sentí bien porque era acercarse a los personajes femeninos y golpeados. Habla de la violencia en general.

¿De qué manera entendió el lado femenino?
Sigo tratando de entenderlo porque es bien difícil ser mujer en una sociedad como la nuestra. Yo tengo tres hijas adolescentes y, cuando converso con ellas, es terrible la situación. Sienten que no las dejan ser libres. Es que, con todas las atrocidades que ves, te vuelves cuidadoso.

¿Qué opina del acoso sexual en el medio artístico?
Hay un problema en el hombre. ¿Qué es ser masculino? Quizás digan que es ser fuerte, pero eso no es. Desgraciadamente, en nuestra cultura y educación, nos inculcaron que es ser violento y no dejarte pisar. Debemos reflexionar. La mujer debe seguir hablando para que propicie estos cambios en los hombres.

¿Fue testigo de estos casos?
Por supuesto. Tengo familiares que han sido víctimas; incluso han salido en diarios hace tiempo. También sé de casos cercanos. Es un tema delicado.

Ahora se viene la telenovela Mi esperanza. ¿Cuál será su personaje?
Seré el esposo del personaje de Érika Villalobos. Habrá maltrato psicológico, que, a veces, es peor que el físico. Es un villano y espero ponerle un poco de humor. Me están tocando personajes de papás malos.

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