La reconocida orquesta peruana, Agua Marina, tenía dos conciertos programados en el Teatro Caupolicán de Chile, el 6 y 7 de enero. Sin embargo, los recitales se vieron empañados debido a balaceras ocurridas antes de los dos conciertos de la agrupación, que puso en peligro a los asistentes y dejó dos guardias heridos.
Ante ello, el gerente del teatro Caupolicán, José Antonio Araben, brindó su versión de los hechos al programa ‘Arriba mi gente’ , pues recalcó que nunca había ocurrido un hecho parecido en el establecimiento.
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Araben indicó que el viernes 6 de enero hubo dos ataques por una persona en contra de los guardias de seguridad. El primero antes del concierto y el segundo durante el recital.
“El día viernes alrededor de la medianoche se bajó una persona de un auto con una pistola para dispararle a uno de nuestros guardias a quemarropa. Esto no ocurrió debido a la suerte que tuvo el guardia, no se dispararon los tiros, se le trabó el arma y nosotros recuperamos todo eso. Una hora después, estando Agua Marina en el escenario, volvió en una moto a disparar en al interior de la puerta principal del teatro”
El gerente recalcó que después de los ataques preguntaron a distintas personas de la organización del evento si tenían algún inconveniente con alguna persona, ya que nunca había ocurrido un hecho parecido en el teatro.
“Ahí viene una investigación, empezamos a preguntar a la productora, a los guardias, empezamos a recabar información y nos preparamos para la segunda fecha que era el día sábado”
Incluso, en la segunda fecha del concierto volvieron a disparar en contra de los agentes de seguridad, hecho que dejó 2 heridos.
“Al día siguiente, alrededor de la misma hora, regresa esta moto para disparar desde la calle hacia el hall del teatro. Ahí hieren a dos guardias, en cada una de sus piernas. Es así que se decidió en conjunto con la banda terminar con el espectáculo porque no presentaba las normas de seguridad”.
Por último, dejó en claro que no hubo fallecido después del cobarde ataque: “Gracias a Dios, no hubo víctimas, el público se retiró alterado”.
Agua Marina no es ajeno a los hechos de violencia en sus conciertos. En su show por fin de año, la orquesta de cumbia fue afectada por una explosión en la ciudad de Trujillo. Se trata del segundo incidente del 2022. El primero se vivió en el mes de agosto. Tras registrarse el hecho, el grupo decidió parar su presentación. Se presume que la agrupación venía siendo víctima de extorsionadores.
En mañana del 29 de agosto, los músicos la orquesta sechurana ‘Agua Marina’ fueron despojados de sus pertenencias por delincuentes provistos con arma de fuego. El asalto ocurrió en la carretera que desvía de la Panamericana hacia Sechura - cerca a Bayóvar.
Una camioneta Hilux blanca interceptó el bus de la agrupación, de donde salieron 12 inescrupulosos, quienes con disparos al aire obligaron al conductor a parar su marcha. Tras golpear a los choferes, amenazaron a los integrantes con armas de fuego y les arrebataron todo el dinero que tenían, un montó valorizado en 8 mil soles.
‘Agua Marina’ regresaba por Sechura después de presentarse en Trujillo el domingo 28 de agosto. La orquesta enrumbaba a Piura, donde realizaría otra presentación.
Por su parte, el dueño de ‘Agua Marina’, José Quiroga Querevalú, procedió a hacer la respectiva denuncia en la comisaría de Parachique, en la provincia de Sechura.
‘Agua Marina’ es una agrupación de cumbia peruana creada en 1976, en Sechura, en el departamento de Piura. Esta orquesta, junto a Armonía 10 y el Grupo 5, es considerada como una de las más importantes del país, pues gracias a ella se popularizó este género musical.