Siempre depende de qué es lo que se ha dañado, pero en realidad acá lo que debemos tener claro es que esta es una operación que todos los días produce 8 millones y medio de dólares para ser exportados. Entonces, si algo dentro de este proceso productivo impide esa producción, eso es lo que está costando diariamente en cuanto a exportación. En impuestos es otro tanto muy importante. Y de esos impuestos, más de la mitad van a las regiones donde está la mina, o sea, los mismos apurimeños están siendo perjudicados por esta situación que está generando un grupo de estas dos comunidades. Si bien esto es algo que va a tomar un tiempo repararlo, es importante tener presente que cada día que no opere la mina está perdiendo todo el Perú y también muy particularmente la región de Apurímac.