Un largo debate en el Pleno del Congreso, sobre aprobar o no el dictamen del proyecto de ley que plantea que las empresas implementen guarderías y salas cuna para los hijos menores de cinco años de sus trabajadores, finalizó con la devolución de este a la Comisión de Trabajo.
La iniciativa, de Indira Huilca (Nuevo Perú), dispone que las empresas con 50 o más trabajadores con responsabilidad familiar financien la implementación y gestión de las guarderías, que deberían ubicarse en los centros de trabajos o en zonas anexas.
Para el congresista Carlos Bruce (PpK), la medida soluciona un problema en favor del trabajador, pero genera otro, al desincentivar la contratación de personal con hijos de cero a cinco años: “Esto atenta contra la formalización laboral. Algo que busca beneficiar a los trabajadores, va a terminar perjudicando a los mismos (…). Esto va a generar sobrecostos”.
En su intervención también advirtió que la medida puede poner en riesgo a los niños, pues las empresas no son entidades educativas capacitadas para cuidarlos.
Desincentivo
Al respecto, el abogado laboralista del Estudio Payet, Germán Lora, explica que la iniciativa desincentiva las contrataciones y genera sobrecostos, por lo que deberían analizarse incentivos, como reducir los aportes a la seguridad social en favor de los empleadores que implementen salas cunas.
“También se podría dar facilidades en ingresos y salidas, horarios o licencias (...). También pasa por un tema de teletrabajo”, aclaró Lora, al referirse que el trabajo a distancia podría ser una alternativa más.
Ricardo Herrera, laboralista del Estudio Muñiz, también señala que el proyecto podría generar sobrecostos y aclara que requiere un análisis estadístico y sociológico para delimitar el perfil de los trabajadores beneficiados.
“Si estableces esta obligación para todos, incluidas las pymes (pequeñas y medianas empresas), vas a salir con otro sobrecosto laboral. Y esta es la constante de este Congreso”, advirtió Herrera.