“El resto de 2023 será muy interesante para América Latina, ya que varios países celebrarán elecciones que permitirán a los electores expresar lo que piensan de sus gobiernos”.  (Ilustración: Giovanni Tazza)
“El resto de 2023 será muy interesante para América Latina, ya que varios países celebrarán elecciones que permitirán a los electores expresar lo que piensan de sus gobiernos”. (Ilustración: Giovanni Tazza)

Existe mucho descontento popular en la región por la inseguridad, violencia, inflación, corrupción y falta de oportunidades que azotan a gran parte de nuestros países. Como resultado en la gran mayoría de elecciones nacionales entre 2018 y 2022, se derrotó al partido gobernante, en muchos casos eligiendo a opciones de izquierda. Así vemos que Perú, Chile, Colombia, Argentina, México y Brasil eligieron gobiernos de izquierda. En dichas elecciones solo se mantuvo en el poder el partido gobernante en Argentina, a pesar de la agudización de los problemas económicos y corrupción que enfrenta.

Este año en la reciente elección presidencial en Paraguay y en la de los miembros del Consejo Constitucional en Chile triunfó la derecha. Muchos se han entusiasmado con estos resultados que podrían significar el inicio de un giro a la derecha en la región, desencantada por la ineptitud de los gobiernos de izquierda y su incapacidad para atacar los problemas que aquejan a la población. En Ecuador, ocurrió lo contrario, ya que el partido de centro-izquierda de Correa tuvo importantes victorias en las ciudades más grandes y también rechazó en un referendo una serie de propuestas del presidente Lasso. Esto envalentonó a los congresistas que trataron de vacarlo vía juicio político, presionándolo a utilizar la muerte cruzada que implica el cierre del Parlamento y nuevas elecciones generales inmediatas.

El resto de 2023 será muy interesante para América Latina, ya que varios países celebrarán elecciones que permitirán a los electores expresar lo que piensan de sus gobiernos. Tendremos elecciones en México, Guatemala, Ecuador, Argentina y Colombia. En junio, votantes de Coahuila y del Estado de México elegirán a sus gobernadores, lo que podría ser un anticipo de las elecciones nacionales en 2024. En dicho mes, Guatemala también elige a su presidente, a la totalidad del Congreso y autoridades municipales, en un entorno caldeado por acusaciones del uso político de la justicia contra periodistas, fiscales y jueces que investigan la corrupción.

En agosto habría nuevas elecciones nacionales en Ecuador. En octubre los argentinos votarán por un nuevo presidente, un tercio del senado y la mitad de diputados y autoridades subnacionales, en un contexto de crisis económica, corrupción, alta inflación y polarización que podría llevar a la derrota de los peronistas. Colombia también tendrá elecciones en octubre para elegir a gobernadores, diputados departamentales, y autoridades municipales y ediles; lo que permitirá medir el grado de apoyo a la gestión del gobierno. ¿Los resultados significarán un cambio de rumbo en la región hacia la derecha y políticas económicas más sensatas? No adelanto opinión y esperaré a lo que nos depara estas próximas elecciones.

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