Max Weber se refirió a la ética de la convicción y a la ética de la responsabilidad. También nos podríamos referir a la ética de las reglas y a la ética de las jugadas. En una sociedad diversa y múltiple como la nuestra, en tiempos complejos y confusos como los que nos ha tocado vivir, sus ciudadanos empresarios y ejecutivos, debemos comprometernos más en la interacción con ciudadanos de otras esferas de acción -médicos, trabajadores, artistas, políticos, funcionarios públicos, profesores, magistrados, periodistas-, para contribuir a la defensa firme de una economía social de mercado, la ética de sus reglas macro, sus requisitos específicos, el valor de la libertad, de la propiedad y de los contratos, de la competencia, de la innovación y de la autonomía.