Carlos Oliva, ministro de Economía y Finanzas. (Foto: GEC)
Carlos Oliva, ministro de Economía y Finanzas. (Foto: GEC)

Redacción PERÚ21

redaccionp21@peru21.pe

El ministro de Economía y Finanzas, , afirmó esta noche que su cartera corregirá a la baja la proyección de crecimiento de la economía peruana para 2019 de 4.2% a una tasa cercana a 3.7%. 

"La idea es que [el crecimiento económico] esté cercano al PBI potencial, que es de 3.7%. Va a estar en ese ámbito", sostuvo el titular del en entrevista con Canal N.

Además, dijo que el pobre crecimiento de abril (+0.02%) se dio por factores externos, como la desaceleración económica global y los conflictos sociales.

"Sin estos factores exógenos, la economía pudo haber crecido entre 1.5% y 2%", acotó.

Para reactivar la economía, el ministro señaló que cuentan en cartera con un plan de infraestructura que incluye 60 proyectos, que atañen a múltiples sectores, por un valor superior a los S/90,000 millones.

Algunos de estas obras ya se encuentran en ejecución, mientras otras están aún en vías de desarrollo.

Además, Oliva refirió al proyecto minero Tía María, que supone una inversión de US$1,400 millones.

"Entiendo que puede haber gente reacia [a aceptar el proyecto]. Estamos garantizando la prestación de servicios básicos para la zona", acotó.

Indicó, también, que si este proyecto entra en su etapa de ejecución, aportaría un crecimiento adicional de 0.3 puntos porcentuales al PBI.

Costo de las reformas

Parte de la desaceleración económica, añadió Oliva, se debió al ruido político que significó el enfrentamiento entre Ejecutivo y Legislativo.

"Cuando se hacen reformas estructurales, en el corto plazo hay un efecto que puede ser negativo. Pero es una inversión que hacemos para algo mejor", observó.

Señaló que la reforma de las instituciones es un paso necesario para superar la barrera del 5% en el crecimiento del país.

"En cierta manera, estamos pagando el precio de la reforma política. Una de las nueve áreas tiene que ver con las instituciones. Si no mejoramos la calidad de las instituciones no vamos a poder crecer a 5%", dijo. 

"Si por luchar contra la corrupción vamos a afectar el crecimiento del PBI, pues mala suerte. Cuando uno se enfrenta a esto, al principio hay un tipo de reacción. Las empresas corruptas se pueden ir del país", acotó Oliva.