Hoteles están habilitados para operar en esta nueva cuarentena, pero el tranporte de los huéspedes genera una baja ocupabilidad.
Hoteles están habilitados para operar en esta nueva cuarentena, pero el tranporte de los huéspedes genera una baja ocupabilidad.

Christian Lengua

Con la nueva dictada a fines de enero para mitigar los contagios del COVID-19, el Gobierno decidió que una serie de actividades puedan seguir operando. Por ejemplo, en las regiones con nivel de alerta extrema, en la que se incluye a Lima, se permite que permanezcan abiertos categorizados, hospedaje (apart hotel) y transporte turístico. Así como albergues, hostales y establecimientos de hospedaje no clasificados y categorizados.

Sin embargo, pese a estar abiertos los establecimientos, el transporte está restringido. Es decir, por ejemplo, si una familia de Lima quiere ir a un hotel en Lunahuaná o Paracas, no tienen cómo movilizarse, ya que tanto Ica como Lima están en un nivel extremo.

Tibisay Monsalve, gerente general de la Sociedad Hoteles del Perú, indicó que han consultado sobre este particular con las autoridades y no está permitido el transporte, ni siquiera con un salvoconducto.

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“Ahora, en zona de nivel extremo, si un pasajero decidió hacer el confinamiento allí puede hacerlo. O si acaba de llegar al país y decide hacer la cuarentena y confinamiento en el hotel puede hacerlo. Es más, los hoteles tiene tarifas especiales de larga estadía”, refirió la ejecutiva.

Cabe indicar que un turista de Lima no puede viajar en auto a un destino cercano, pero sí podría desplazarse por vía aérea a determinados destinos como Punta Sal o Máncora, con el requisito que se presente la prueba molecular o antígena.

Por su parte, Otto Regalado, profesor de la maestría en Marketing de Esan y experto en turismo, comentó que es importante recordar la coyuntura por la que estamos pasando y sobre todo las diferentes regiones. “En ese sentido, siempre los hoteles tratarán de brindar su oferta en las diferentes oportunidades que se presenten”.

Puso como ejemplo una tendencia que se está presentando en los hoteles como es el turismo de teletrabajo, o turismo de trabajo a distancia, que es cuando las personas carecen de espacios en sus casas y prefieren alquilar una habitación de hotel.

Asimismo, comentó que hay dos nichos de mercado a los que los hoteles se han dirigido. Una es cuando los hoteles, como es el caso de Casa Andina y otros, ofrece habitaciones para personas que pagan un alquiler y se mudan con tarifas preferenciales por periodos largos. Y otra opción es la arriba mencionada de teletrabajo, dirigida a empresas, para que los empleados aseguren un ambiente de bioseguridad.

Regalado mencionó que hay una tercera opción en la que los hoteles ponen a disposición habitaciones con camas clínicas equipadas con oxígeno. “Aquí cambiaría el giro del negocio, porque funcionaría prácticamente como un hospital. Pero muchos médicos particulares hacen eso y atienden directamente ante la falta de camas UCI”.

Para el experto, es un hecho que toda esta situación impacta en la ocupabilidad, como resultado de la crisis que estamos pasando. “Pero los hoteles deben ser creativos y ver alternativas que apunten a su recuperación”, apuntó.

Añadió que cuando se levanten las restricciones muchas personas que atraviesan por un periodo de incertidumbre y más estrés de lo normal buscarán hacer turismo interno, y los hoteles deben estar preparados y dar todas las facilidades.

LARGA ESTADÍA

Ivo Saona, director de marketing de Libertador Hotels, Resorts & Spas explicó que todo el portafolio de hoteles se encuentran autorizados por el gobierno y cumpliendo con los planes de vigilancia de Produce y Mincetur siguen operando.

En el caso de The Westin Lima y del Hotel Paracas, a Luxury Collection Resort, han implementado un paquete de larga estadía para que los huéspedes puedan quedarse en las habitaciones y tener acceso a todas instalaciones aplicando descuentos en servicios como lavandería, restaurantes y WiFi de alta velocidad, para que puedan trabajar durante su estadía en caso lo requieran.

El directivo detalló que el 2021 seguirá siendo un año de transición en el camino de la recuperación del sector. Y aun con todas las restricciones, observa signos positivos, ya que “las personas quieren viajar y explorar, lo vemos en los patrones de reservas y de búsquedas. Las personas están ansiosas por viajar lo antes posible, pero desean minimizar los riesgos para la salud al optar por destinos más tranquilos, itinerarios personalizados y viajes más privados”.

En ese proceso de captar el turismo interno, Saona afirmó que el cliente local siempre ha sido uno de los mercados más importantes para el hotel ubicado en Paracas. Son personas que buscan salir de la rutina de su día a día, y quieren contar con espacios adecuados que no encuentran en sus casas para poder trabajar o relajarse. Con ese fin, tienen listos productos y paquetes acompañados de experiencias gastronómicas. Y acaban de lanzar un programa de membresía exclusivo para el mercado local.

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Franco Olcese, investigador del centro Wiñaq y analista político.

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