Yo resumiría que los más de 7,500 colaboradores del BBVA Perú confiaron en mí y esa confianza hacia el líder transforma cualquier organización. Ellos vieron que el banco contaba con un plan, una estrategia, el seguimiento de esta estrategia y que, más allá de estos tres grandes temas, había un acompañamiento real. Por ello, he tenido que conocer todo el Perú. He tenido trayectos de más de 13 horas en carreteras, en trochas, cruzando ríos del Perú y esto hace que el acompañamiento a los equipos se sienta real. Estas visitas que hemos hecho no son para la foto, sino que tienen por objetivo un involucramiento completo del equipo conmigo, así como conocer las necesidades de los clientes.