Diariamente realizamos pequeños gastos, muchos de ellos necesarios y otras no tanto. Cosas como una gaseosa o una galleta de media mañana, taxis para no llegar tarde a algún lugar, entre otros. Son gastos que comúnmente llamamos ‘gustos’ y que a veces si no se presta la atención necesaria no puede causar más de un problema.
A esos gastos de le conoce como ‘gastos hormiga’ y son pequeñas sumas de dinero que generalmente no les prestamos ninguna atención y pasan prácticamente desapercibidos. No obstante, los ‘gastos hormiga’ pueden tener un efecto muy perjudicial en nuestro presupuesto, destruyen nuestra capacidad de ahorro e incluso llevarnos al endeudamiento innecesario.
Asimismo los ‘gastos hormiga’ no solo afecta la economía personal, sino que se ha llegado a perjudicar a las empresas. Esto a partir de pequeñas compras de artículos que si se hace más frecuente puede generar grandes pérdidas para la organización.
Sin embargo, no todo está perdido si estos tipos de gastos se evitan se pueden convertir en más beneficios para la persona y/o empresa. Pero ¿cómo te puedes dar cuenta cuáles son estos gastos y cómo puedes evitarlos? Todos los detalles a continuación.
Para poder enfrentar a los ‘gastos hormiga’, primero es importante identificarlos. Registra cada una de las pequeñas compras que haces en el día.
Una vez identificados, sumamos todos los gastos y calculamos cuánto gastamos al mes. Así por ejemplo, si compras diariamente un paquete de galletas de S/ 1.00, el precio parece irrelevante, pero mensualmente equivale a 30 soles. ¿Qué utilidad le podrías dar a este dinero? Pues podría ayudarte a pagar alguna otra deuda importante. Es así que identificas este tipo de gastos.