En los últimos años, las importaciones declaradas de manera fraudulenta se han incrementado, yendo en detrimento de las ventas de pequeñas y medianas empresas del rubro textil y de confecciones, lo que a su vez ha impactado en la generación de empleo formal. Así lo advierte la

Para tener una idea sobre la calamitosa situación de esta industria, de las casi 202 millones de prendas importadas en lo que va de 2018, el 46% entró al país por debajo de un dólar.

Manuel Reaño, gerente del comité de textil-confecciones de la SNI, explica que el precio no concuerda siquiera con los costes de elaboración de los productos.

Esta mala práctica ha contribuido a estancar las contrataciones de personal. Mientras en 2010 esta industria contaba con 465 mil trabajadores, en 2017 tuvo solo 463 mil.

Por esto, la SNI ha presentado un proyecto que pide reformar el sistema de cobro de aranceles para combatir este fraude.

La propuesta radicaría en gravar los artículos importados, no proporcionalmente al precio, sino según el peso de la mercadería. Esto impediría a los empresarios declarar precios por debajo del verdadero.

TENGA EN CUENTA
-Las mujeres representan el 63.5% de la fuerza laboral en esta actividad.

-Las microempresas significan el 95.4% de la estructura productiva de este rubro.

-Los principales productos textiles que se exportó en 2017 fueron prendas de vestir (US$828 millones) y fibras e hilados (US$355 mllns.).