Estimular el empleo y la economía con una inversión de US$19,000 millones es una realidad que sería posible con la puesta en marcha de proyectos de inversión privados en 2019 y 2020. De este monto, previsto por el B, US$11,800 mllns. corresponden a la minería, de los cuales el 64% (US$7,552 mllns.) estaría en riesgo.

Guido Valdivia, director ejecutivo de la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco), comentó que “más de un tercio de estas inversiones se localizan en cinco regiones que han elegido gobernadores regionales antimineros y eso genera una gran contingencia”.

Tales regiones son Apurímac, Arequipa, Moquegua, Junín y Puno.

La preocupación radicaría en que el rechazo a la inversión minera en esas regiones pueda afectar al y con ello al crecimiento del PBI, pues este año se prevé que la economía sea estimulada por la inversión privada, que se incrementaría (6.5%), y no por la inversión pública.

Ante esto, el gremio consideró importante que el Gobierno pueda “monitorear el riesgo político que podría desestabilizar el panorama de inversiones”.

De no haber interrupciones en la puesta en marcha de los proyectos privados, Capeco estima que el sector construcción crecería 5.06% este año.

En los últimos 12 meses a noviembre de 2018, la producción de este sector aumentó 5.7%.

Saneamiento en Lima
Además, el presidente de Capeco, Enrique Espinosa, responsabilizó al ministro de Vivienda, Juan Piqué, por el aniego de y atribuyó el problema a la falta de presupuesto para el mantenimiento de infraestructura.

"Si el ministro tuviera algo de sangre en la cara, debería de renunciar”, afirmó. También se advirtió que existen 12 puntos de conexión de desagüe con riesgos similares a los de SJL.