Por Mercedes Aráoz, exministra de Comercio Exterior y Turismo
Es el momento oportuno para que desde el Gobierno tomen más iniciativas de promoción de las inversiones, y den mayor seguridad jurídica y tributaria para las empresas. Es momento también para retomar el rumbo del crecimiento económico. Todo eso es parte de la agenda de APEC para el bienestar de nuestra población, y eso también implica mirar hacia adentro y ser responsables.
Además, se ha firmado y se ha puesto en operación el megapuerto de Chancay que permite al Perú convertirse en un hub logístico del Pacífico Sur. Con Estados Unidos, en tanto, estamos hablando de una base aeroespacial en Talara lo que significa que nuestro país genera un clima adecuado para recibir la inversión extranjera, sea de donde sea, siempre y cuando se cumplan las normas nacionales.
Al tener en el país a los líderes de las dos potencias mundiales (Estados Unidos y China), demostramos que no nos aliamos con un país u otro, que no somos de un eje político u otro, sino que miramos a la inversión como algo que beneficia las relaciones internacionales de manera balanceada, sin preferir a uno antes que a otro.
APEC nos da la oportunidad de plantear la temática del crimen organizado para buscar un efectivo trabajo de inteligencia internacional. Este es un problema y una lucha que recorre a todo el mundo y a los países. Nosotros tenemos que fortalecer a la Policía Nacional del Perú y mejorar el sistema de justicia para que no haya impunidad.
Hay que tomar en cuenta que lo que se plantee en estos acuerdos de cooperación no son temas obligatorios, sino más bien por presión de pares nos lleva a mejorar en la agenda. Los países cooperan para llegar a los avances adecuados.
Las oportunidades están abiertas y el Perú tiene una política de mucha apertura. Además del puerto de Chancay, podemos ver proyectos en aeronáutica y servicios. Si hay alguna normativa adecuada, podrían generarse Zonas Económicas Especiales donde podemos tener tecnología e industrias de mayor nivel.