El Perú es la patria de los emprendedores, pero necesitan un impulso [OPINIÓN]

Por: Michiko Oshiro, jefa académica de las carreras de Negocios y Finanzas del instituto Certus (*)

Si hay algo por lo que los peruanos destacamos a nivel mundial, aparte de nuestra riqueza culinaria, es nuestra gran capacidad para emprender. De hecho, de un total de 28 países, ocupamos el tercer lugar en el Índice de Espíritu Emprendedor de Ipsos. Prueba de ello es que el 55% de la población trabaja en un negocio propio y la mitad de ellos se inició durante la pandemia, según Dateum Internacional.

No obstante, la Cámara de Comercio de Lima advierte que solo 1 de cada 10 empresas se mantiene a flote más de un año. ¿Cuál es la razón?, ¿Qué factores impiden que un emprendimiento prospere en el tiempo?, ¿y qué podemos hacer para cambiar esta situación e impulsar a quienes se atreven a hacer empresa?

MIRA: 67% de encuestados desaprueba gestión del presidente Pedro Castillo, según Ipsos

En mi opinión, construir un ecosistema de emprendimiento basado en confianza y cooperación mutua es fundamental. Entre los componentes que conforman este ecosistema, destaco cuatro. El primero es el emprendedor, pues antes de lanzarse a la piscina, debe identificar necesidades reales y conocer mejor a los clientes. Además, necesita actualizarse y capacitarse para liderar e innovar. Ojo, un emprendedor tiene que saberlo todo, pero sí debe ser capaz de dirigir a un equipo que sume conocimientos y habilidades a su negocio.

El segundo es el Estado, institución que debería asumir un compromiso serio con los emprendedores mediante entidades de promoción, políticas de formalización y beneficios de tributación. Sin embargo, según Global @dvidor, el 56% de emprendedores percibe que el Estado no les brinda ayuda adecuada. El tercero son las Instituciones Financieras que, a opinión de los propios emprendedores, tampoco contribuyen a su desarrollo y sostenibilidad. Creo que es importante rediseñar los productos financieros vigentes, con empatía y verdadero propósito de colaboración, para lograr un ganar-ganar.

El cuarto componente es la academia. Las instituciones educativas tienen la responsabilidad de formar a los futuros empresarios del país. Por tanto, deben fomentar la creatividad e innovación, impulsando el uso de metodologías y tecnologías que permitan reaccionar rápido a las nuevas formas de emprender de los jóvenes. De esta manera, se podrán establecer bases sólidas que despierten el espíritu emprendedor de los jóvenes y los preparen para hacer frente a los diversos retos y contextos.

En suma, la única manera de impulsar el emprendimiento de manera sostenible y de capitalizar ese espíritu emprendedor que nos caracteriza, es trabajando sinérgicamente con todo el ecosistema antes mencionado. Así lograremos generar oportunidades de desarrollo para todos y el Perú no solo será la tierra de grandes emprendedores, sino un país de grandes empresarios.

(*) Michiko Oshiro es la jefa académica de las carreras de Negocios y Finanzas del instituto Certus, con más de 12 años de experiencia en el sector de educación superior. Es licenciada en Administración de Empresas por la UPN; tiene una maestría en Gestión Educativa por la PUCP y una especialidad en Gestión del Currículo de Calidad.

VIDEO RECOMENDADO: