Por Claudia Ruaro, gerente comercial de Air France y KLM para Perú
La aviación está ante uno de sus mayores desafíos: reducir su huella de carbono y alcanzar la neutralidad para 2050. El uso de combustible sostenible de aviación (SAF) se ha posicionado como la respuesta más prometedora para reducir las emisiones del sector, aportando hasta un 65% de la solución. Sin embargo, el camino hacia una aviación sostenible es largo y aún hay barreras por superar, incluidos la transición hacia el combustible sostenible, la implementación de nuevas tecnologías y una estrecha colaboración entre la industria, la sociedad y el Gobierno.
Perú tiene el potencial para desempeñar un papel fundamental. Como país con una fuerte tradición agrícola, podríamos aprovechar los desechos orgánicos y otros subproductos para producir SAF, y así no solo contribuir a la sostenibilidad de la industria aérea, sino también potenciar el trabajo y desarrollo económico en nuestras regiones. Pero, la implementación de este combustible en la aviación sigue siendo limitada y aún estamos lejos de ver su uso a gran escala.
En 2023, como Grupo nos convertimos en el mayor usuario de SAF en el mundo por segundo año consecutivo al incorporar 80,000 toneladas métricas de este combustible. A nivel global, apenas un 2% de los vuelos utilizan SAF y, aunque en 2023 empleamos el 17% de la producción total de SAF en el mundo, todavía estamos muy lejos de lograr la adopción masiva que se necesita para impactar significativamente en la reducción de emisiones.
En nuestra hoja de ruta hacia un futuro más sostenible, priorizamos un foco en tres pilares clave: la renovación de la flota, el eco-pilotaje y, por supuesto, el impulso del SAF, trabajando iniciativas innovadoras como el uso de IA para optimizar recursos y reducir el desperdicio.
La realidad es que, aunque existen tecnologías emergentes, como los aviones eléctricos o de hidrógeno, estas no son una opción viable para vuelos de larga distancia, lo que refuerza la importancia del SAF como la mejor alternativa para descarbonizar la aviación en el corto y mediano plazo.
Perú tiene la oportunidad de convertirse en un referente en la producción de SAF y contribuir al futuro de la aviación sostenible. Pero, para lograrlo, se necesita un esfuerzo conjunto, políticas claras y un compromiso real por parte de todos los involucrados. Desde Air France-KLM seguiremos impulsando el uso de SAF y apostando por la innovación; pero el cambio verdadero solo será posible si trabajamos juntos por un cielo más limpio y un futuro más responsable.