Aunque se prevé que el dólar cierre el año en S/3.55, el tipo de cambio es impredecible y el análisis fundamental ya no está funcionando, además no hay un modelo que pueda decir cómo irá la moneda estadounidense, sino tendencias pasadas, informó Guillermo Arbe, gerente de Estudios Económicos de Scotiabank.
Indicó, además, que hay cierta expectativa de que la situación cambie en la segunda mitad del año, después de la elecciones, debido a los precedentes de un rebote de la economía e inversión.
CRECIMIENTOCon respecto a las proyecciones de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI), Arbe dijo que existe una obsesión sobre cuál será la cifra para este año y que "en realidad crecemos menos, lo que hace que esta cifra se base en la minería", es por ello que el problema principal no es llegar a una tasa de 3.5%, sino saber qué no está creciendo, como la inversión privada, que está en negativo.