Según el estudio Kusikuy 2019, elaborado por Arellano para Perú 2021, los peruanos nos ponemos una nota de 16.21 sobre 20 en cuanto a nuestra felicidad. Para el 66% lo que los hace más felices es tener buena salud y para el 36% es vivir en un lugar seguro.
El resultado obtenido comprueba que la gran mayoría de peruanos se ubica en los rangos más altos de felicidad:
- 51% de los encuestados se sitúa en el rango sobresaliente (entre 20 y 17 puntos)
- 37% aprobado (entre 16-14 puntos)
- 8% raspando (entre 13-11 puntos)
- 4% jalado (menos de 11 puntos)
“Un Perú feliz es un país con igualdad de oportunidades para todos y en el que todos – sin excepción – puedan realizar su potencial y lograr sus metas. Un país sin pobreza, corrupción, ni violencia”, comentó Luis Torres Mariscal, Presidente de Perú 2021.
Asimismo, cuando se le preguntó a los encuestados sobre la felicidad percibida en sus compatriotas, el puntaje fue menor que 12.37.
¿A qué se debe esto?
Los participantes manifestaron percibir a sus compatriotas como “personas en problemas” por verse en la situación de afrontar la inseguridad ciudadana y la ausencia de autoridades óptimas.
A pesar de ello, también mencionaron atributos positivos (“ser emprendedores”, “perseverantes” y “dar la mano”), que sirven de paliativos para poder desarrollarse “a pesar de tener todo en contra”. Entonces, el peruano es visto a nivel social como alguien que no tiene una base sólida de bienestar, al que le toca esforzarse de más (o sufrir) para poder progresar.