Procesos burocráticos y la falta de presión de parte de Vicente Zeballos asfixiaron a la Ciudad Blanca.
Procesos burocráticos y la falta de presión de parte de Vicente Zeballos asfixiaron a la Ciudad Blanca.

La ola de retrasos y procesos ineficientes por parte del Ejecutivo para recibir la donación de los 20 mil litros de oxígeno semanales de parte de Southern Perú para y Moquegua podría tener responsabilidad penal. Como lo confirmó Perú21 en su edición de ayer, el ofrecimiento de la empresa llegó la mañana del 22 de mayo a través de una llamada telefónica: un funcionario de se lo comunicó directamente a Vicente Zeballos, en ese momento jefe del gabinete.

La compañía a cargo de realizar las pruebas del oxígeno que la minera ofrecía donar fue Praxair Perú, una empresa dedicada a la venta y distribución de gas industrial contratada por el Estado en esta emergencia. La primera prueba recién se pidió el 12 de junio, 21 días después de que Zeballos conociera la disponibilidad de Southern para donar oxígeno para el sur del Perú. Pero si bien la orden de servicios fue recibida por Praxiar el 12 de junio, esta compañía recién tuvo las facilidades para viajar a Ilo, donde se encuentra la planta de Southern, el 17 de junio. El viaje, coordinado por el fue por vía terrestre, cuando la urgencia bien justificaba un vuelo de la FAP directamente al aeropuerto de Ilo.

El viernes 19 de junio, una vez en Lima, Praxair pudo analizar la muestra y obtener los resultados el mismo día. Sin embargo, el Cenares recibió esos resultados el 22; en plena no había nadie en sus oficinas el fin de semana. El informe que entregó Praxair al Cenares registraba que los parámetros de humedad del que había tomado como muestra eran ligeramente superiores a los establecidos por el Minsa. El Cenares entonces le pidió a la Southern que reduzca esos niveles de humedad de su producción. Los ingenieros de la minera consultados por Perú21 sostienen que ese desbalance de humedad nunca existió.

La demora en las decisiones, los traslados y otros procedimientos no facilitados por la PCM y el Cenares habían generado ya la pérdida de 31 valiosos días en la lucha contra la pandemia que enfrentaría la , pero la cosa no quedó ahí.

Cronología de retrasos inexplicables
Cronología de retrasos inexplicables

El 3 de julio, Praxair recibió una nueva solicitud para una segunda prueba. Nuevamente su equipo de técnicos fue trasladado hasta Ilo por vía terrestre, salieron de Lima el 7 de julio. Esta vez la compañía entregó los resultados al Cenares el 10 de julio.

El Cenares demoró hasta el 14 para emitir el documento en el que se admitía el oxígeno donado por . Ha trascendido que Vicente Zeballos estuvo al tanto de cada suceso. ¿Por qué no presionó? El país está en estado de emergencia. ¿Por qué permitió el premier que la burocracia siguiera caminando a su ritmo? ¿Qué se esconde detrás de tamaña indolencia?

El 14 de julio, la cifra de contagios y muertes ya se había desbordado y la ciudad sufría los estragos virulentos de la pandemia. Tuvo que mediar la intervención de la prensa. El sábado 18, Perú21 tuvo que publicar una portada en la que convoca la presencia del presidente y de la nueva ministra de Salud en Arequipa. El domingo 19, después de las escenas desesperadas que ambas autoridades presenciaron en la puerta del hospital general de la Ciudad Blanca, el Gobierno ordenó recién la distribución del oxígeno donado. El lunes 20, los pacientes afectados comenzaron a ser atendidos, pero la cifra de mortandad ya se había duplicado en relación a lo registrado desde el inicio de la pandemia hasta el mes anterior y la población había vivido tres semanas de abandono y dolor.