Para ordenar el bolsillo y llegar a fin de mes sin problemas, es fundamental contar con un presupuesto personal o familiar en donde se incluya el monto que gana y gasta. El profesor y experto en finanzas de Pacífico Business School, Jorge Carrillo, explicó que los desembolsos se deben organizar por prioridades.
Por ejemplo, consideró que en el primer grupo de este presupuesto se deben incluir los gastos domésticos como pago del crédito hipotecario, alquiler de inmueble, servicios, alimentación, entre otros que son básicos para vivir.
En un segundo grupo, consideró que se puede incluir el monto que se destina a educación, salud y aseo personal. En este caso, en un ítem de cada seis meses se puede incluir el desembolso para vestimenta y peluquería.
El monto que se destina para transporte, ya sea público o privado, podría ubicarse en un tercer lugar. Acá se tiene que tomar en cuenta el gasto para el bus, taxi, el combustible, así como el monto que se debe invertir en el mantenimiento del vehículo.
“Luego de todo eso vienen grupos que no son gastos tan fundamentales, pero que son frecuentes, como aquellos gustitos que nos damos a la semana o mensualmente. Acá tenemos los llamados ‘gastos hormiga’”, afirmó.
Un punto que no puede faltar en el presupuesto es el monto que se destina para la emergencia. Jorge Carrillo consideró que un monto adecuado que se debería conservar para ese fin es el 20% de los ingresos, pero aclaró que eso también depende de cuánto gana la persona.