China aseguró que responderá cualquier castigo a sus importaciones para proteger  sus intereses. (Foto: AFP)
China aseguró que responderá cualquier castigo a sus importaciones para proteger  sus intereses. (Foto: AFP)

y aplicaron aranceles recíprocos el viernes sobre sus importaciones por un valor de US$34.000 millones y Pekín acusó a Washington de desencadenar la "mayor guerra comercial" de la historia económica.

Horas antes de la fecha límite de Estados Unidos para que los aranceles entraran en vigor, el presidente de este país, Donald Trump, echó leña al fuego advirtiendo de que podrían imponer aranceles sobre bienes chinos por importe de hasta US$500.000 millones, o casi la totalidad de las importaciones estadounidenses desde China el año pasado.

En un comunicado emitido poco después de la fecha límite, el Ministerio de Comercio de China dijo que se vio forzado a responder, lo que implica aranceles del 25% sobre bienes estadounidenses por valor de US$34.000 millones, incluyendo automóviles, soja y langostas.

CRÍTICAS Y ADVERTENCIAS
Algunos correligionarios republicanos de Trump en el Congreso reprocharon sus acciones. "Los aranceles no solo dañan a nuestros agricultores, hacendados y fabricantes de aviones, sino también a cada consumidor estadounidense. Deberíamos estar trabajando con nuestros aliados para aislar a China en vez de escalar una guerra comercial", comentó el senador Jerry Moran, que representa al estado de Kansas, con gran peso agrícola.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, advirtió que podría imponer aranceles a China por hasta US$500.000 millones. (Foto: Reuters)
El presidente de EE.UU., Donald Trump, advirtió que podría imponer aranceles a China por hasta US$500.000 millones. (Foto: Reuters)

Los futuros de la harina de soja china cayeron más de 2% el viernes por la tarde, para luego recuperar la mayoría de las pérdidas, debido a la incertidumbre inicial sobre si China había implementado o no los aranceles sobre una lista de bienes estadounidenses, extremo que confirmó más tarde.

"Podemos decir probablemente que la guerra comercial ha empezado oficialmente", dijo Chen Feixiang, profesor de economía aplicada en la Shanghai Jiaotong University. "Si se queda en 34.000 millones de dólares tendrá un efecto marginal en ambas economías, pero si sube a 500.000 millones como dijo Trump, entonces tendrá un gran impacto para ambos países", añadió.

Las relaciones de Estados Unidos con otros grandes socios comerciales han sido tensas tras la decisión del gobierno de Trump este año de aplicar aranceles al acero y aluminio importados, incluyendo los provenientes de la Unión Europea.

Mientras tanto, Washington intenta renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), con 24 años de vigencia, con Canadá y México.

"La guerra comercial nunca es una solución", dijo el primer ministro chino, Li Keqiang, en una conferencia de prensa junto al primer ministro búlgaro, Bokyo Borissov, en Sofía antes de una cumbre con 16 países de Europa central y oriental.

China nunca iniciaría una guerra comercial, pero si cualquier parte recurre a un aumento de los aranceles, entonces China tomará medidas en respuesta para proteger los intereses en desarrollo", agregó.

Antes del viernes no hubo señales de negociaciones renovadas entre funcionarios chinos y estadounidenses, dijeron fuentes empresariales en Washington y Pekín.

"Nuestro pronóstico de base asume solo una leve escalada de la guerra comercial este verano (boreal)", dijo Bank of America Merrill Lynch en una nota el viernes. "Sin embargo, no podemos descartar una guerra comercial desatada y que provoque recesión", agregó.