La morosidad bancaria se incrementó a 2.44% en julio, manifestó la Asociación de Bancos (Asbanc).
Este resultado, explicó el gremio, fue consecuencia del menor dinamismo de la economía peruana, lo que habría impactado principalmente en las pequeñas y medianas empresas, que ahora tendrían mayores dificultades para el cumplimiento de sus obligaciones financieras.