Los laboratorios también se han visto afectados porque recién entre mayo y junio pasado muchos de ellos pudieron superar el tema de la ampliación de los certificados  de buenas prácticas de manufactura, dice Alafarpe.
Los laboratorios también se han visto afectados porque recién entre mayo y junio pasado muchos de ellos pudieron superar el tema de la ampliación de los certificados de buenas prácticas de manufactura, dice Alafarpe.

Si bien los productos asociados al tratamiento del , como la azitromicina y el , y algunos antigripales están teniendo un pico importante, este no sería el comportamiento de todo el sector farmacéutico.

Ángela Flores, directora ejecutiva de la Asociación Nacional de Laboratorios Farmacéuticos-Alafarpe, explica que hay mucha distorsión estacional por el nuevo y por patologías, pero la realidad es otra, ya que no todas las clases terapéuticas están creciendo.

“El año pasado el mercado de medicamentos se expandió ligeramente, alcanzando los US$1.394 millones, cifra que se mantendría para este año. Recién para el 2021, la industria farmacéutica mostraría tasas de crecimiento”, enfatiza.

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Destaca que la sobredemanda de los medicamentos asociados al COVID-19 ha generado restricción de insumos y problemas en la importación de estos tratamientos al Perú. “Ha sido difícil adquirir medicamentos importados en la velocidad y volúmenes adecuados. En algunos países, como Colombia, se tomaron medidas proteccionistas en aras de cubrir su demanda local. Esto ha generado impactos negativos como la falta de stock en los laboratorios extranjeros y también de insumos para los que producen localmente, por ejemplo, hidroxicloroquina”, asegura.

Precisa que los laboratorios también se han visto afectados porque recién entre mayo y junio pasado muchos de ellos pudieron superar el tema de la ampliación de los certificados de buenas prácticas de manufactura, en algunos casos, hasta fines de año.

Asimismo, comenta, que se ha generado un impacto alto en el acceso a innovación, ya que se ha desacelerado la velocidad de las evaluaciones de tecnología sanitaria para poder incorporar nuevas terapias al país. “El Perú tiene una brecha de más de una década de acceso a nuevas terapias. Una molécula nueva publicada en la FDA hace 18 años tiende a ser evaluada en el nuestro país cuando ya se está teniendo cobertura en otros mercados”, detalla.

VENTAS POR CANAL

Debido también a la pandemia y a la menor demanda de medicamentos en las clínicas (en vista que estas suspendieron las consultas ambulatorias), Ángela Flores indica que los laboratorios reorientaron su abastecimiento al canal institucional.

“Antes destinaban el 60% de sus ventas al canal privado y el 40% al institucional, ahora este último ha ganado fuerza y ha pasado a ser el 50%”, detalla.

Considera que es muy probable que esta tendencia continúe y que los laboratorios sigan priorizando la atención al sector público, debido a los anuncios sobre la construcción de nuevos hospitales en el país.

Respecto a los productos OTC (de venta libre) indica que es necesario que el Gobierno, a través de la Digemid, impulse un mayor acceso a través de canales de venta no tradicionales como los supermercado u otros formatos de ‘retail’. “Esto generaría no solo el aumento de la oferta, también precios más competitivos para el consumidor”, afirma.

VACUNA COVID-19

Flores recuerda que, según la Organización Mundial de la Salud-OMS, existen 133 vacunas en desarrollo contra el COVID-19 en el mundo, de las cuales 10 ya están en estudios clínicos en humanos (entre las fases uno y tres) y 123 en estudios preclínicos.

Destaca que empresas como Pfizer, Johnson & Johnson y AstraZeneca, son algunos de los laboratorios asociados a Alafarpe que están en la carrera por encontrar la vacuna.

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