Cuando todo hacía suponer que Seth Rollins atravesaría una mesa con el cuerpo de John Cena para ganar la lucha, claro, con la ayuda de sus guardaespaldas Joey Mercury y Jamie Noble, incluso hasta del Big Show, hizo su reaparición en el ring Roman Reigns –tras casi tres meses de lesión- para salvarle la noche a Cena en el evento TLC y pueda mantener su opción de retar a Brock Lesnar por el campeonato pesado de la WWE en el Royal Rumble.
El gerente general anónimo de Raw había estipulado una lucha de mesas entre ambos, con una cláusula que decía que si Cena perdía el combate contra Rollins, este dejaría de ser el primer retador al título de Lesnar, por lo que todo estaba en juego para el líder de la 'Cenation'.
Las mesas no tardaron en aparecer desde el inicio del combate, pero cada vez que Cena quería azotar a Rollins contra una, sus guardaespaldas Noble y Mercury intervenían para salvar a su protegido, por lo que Cena tuvo que batallar con tres personas. Incluso, Cena llegó a romper una mesa con el cuerpo de Rollins, pero el árbitro se encontraba caído producto de un golpe accidental por parte de los luchadores, por lo que no pudo decretar su victoria.
Incluso, ambos luchadores cayeron sobre dos mesas a la vez. El árbitro hizo sonar la campana, pero no supo determinar al ganador, por lo que reinició el combate. Cuando las cosas parecían ir a favor de John Cena, Big Show interrumpió el combate para golpearlo y no dejarlo ganar. Y fue cuando la música de Roman Reigns comenzó a sonar y los fanáticos se volvieron locos.
Reigns, con toda su potencia, atacó al Big Show y atravesó su cuerpo por una mesa con su conocida 'lanza'. Luego, noqueó a Rollins con su golpe del 'súper hombre', para que Cena capitalice y rompa la mesa con el cuerpo de su oponente con su 'Ajuste de Actitud', para ganar la pelea y asegurar su lucha contra Lesnar.
En el evento estelar, en un combate de 'Mesas, Sillas y Escaleras' (TLC), el 'lunático' Dean Ambrose fue derrotado por el 'devorador de mundos' Bray Wyatt en un combate donde ambas superestrellas arriesgaron sus cuerpos en pos de un gran espectáculo.
Golpes con las sillas, romper mesas con sus cuerpos, usar las escaleras como armas y trampolín para movimientos aéreos fueron los condimentos que hicieron de esta lucha un verdadero gran final para el último evento del año de la WWE.
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DATO
Renzo Norvanirenzo.norvani@peru21.com