Un hecho insólito ocurrió en la tercera división del fútbol brasileño luego que el masajista del club Sampaio Correa terminó pidiendo su cambio tras lesionarse a un lado del terreno de juego.
El personaje corría a atender a un jugador cuando a mitad del trayecto sintió un estirón y se tocó la parte posterior de su muslo derecho, comenzando a renguear.
Lo curioso e insólito del hecho fue que inmediatamente el masajista hizo una señal con su índice como pidiendo su reemplazo, ante la sorpresa del juez de línea.