Le tiraron plátanos, le criticaron sus locuras, y en su propio país lo compararon con King Kong. Pero 'Super Mario' les calló la boca a muchos de sus detractores con una notable actuación en el partido en que Italia logró su pase a la final.
Balotelli marcó los dos goles en el 2-1 que dejó fuera a la favorita Alemania. El primero con un gran golpe de cabeza, el segundo con un fulminante disparo de derecha que prácticamente sentenció el encuentro.
Pero al margen de lo fútbolístico, el jugador de origen ghanés fue un show en sí mismo con su excéntrica personalidad. Este domingo, España lo tendrá al frente.