El qatarí Mutaz Essa Barshim añadió el domingo un codiciado oro olímpico a su lista de galardones en el salto en alto masculino en los Juegos de Tokio 2020, pero tuvo que compartir la medalla con el italiano Gianmarco Tamberi después de que ambos terminaran con la misma marca de 2,37 metros.
Barshim, de 30 años, y Tamberi, de 29, no fallaron hasta que intentaron superar la marca de 2,39 metros. Después de tres fallos cada uno, acabaron empatados y entablaron una conversación con un funcionario olímpico, que primero les ofreció un “salto de desempate” para decidir el asunto.
“¿Podemos tener dos oros?”, le preguntó Barshim. El funcionario asintió, y los dos atletas se dieron la mano con alegría.
El bielorruso Maksim Nedasekau también superó la marca de 2,37, pero tuvo más intentos fallidos, por lo que se llevó la medalla de bronce.
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En los Juegos de Londres de 2012, Barshim ganó un bronce, que luego fue elevado al segundo puesto del podio. Recogió otra plata en Río de Janeiro cuatro años después y luego ganó dos títulos mundiales sucesivos en 2017 y 2019.
Su marca personal de 2,43 metros es la segunda más alta de todos los tiempos y sólo está por detrás del récord mundial del ícono cubano Javier Sotomayor de 2,45 establecido en 1993.