El empate del Barcelona frente al Villarreal no dejó muy contento a Lionel Messi e incluso sorprendió a todos cuando criticó al réferi del encuentro.
"No me gusta hablar de los árbitros, pero a veces son soberbios y te amenazan a la mínima con sacar tarjeta", dijo la 'Pulga' tras el empate.
El argentino minimizó los siete puntos de ventaja que les lleva el Real Madrid. "Barcelona no se rinde. Acaba de empezar la segunda vuelta, queda muchísimo. Quedan muchos puntos, ahora toca el partido de Copa (del Rey) y tenemos que hacer las cosas bien para intentar estar en la final", finalizó.