Cruza los dedos. El uruguayo Luis Suárez compareció ayer durante cinco horas ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), al que le solicitó que se reduzca la sanción que la FIFA le impuso por morder al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil.
El TAS tomará una decisión al respecto "lo antes posible, probablemente antes del fin de la semana próxima (17 de agosto)", anunció el organismo en un comunicado.
Suárez fue castigado con nueve partidos de suspensión con su selección y con cuatro meses de prohibición de todas las actividades relacionadas con el fútbol, por lo cual no ha podido ser presentado aún por el Barcelona, su nuevo club.
"Todas las partes fuimos oídas. Luis fue interrogado ampliamente", dijo Alejandro Balbi, abogado del 'Pistolero'.
Si el TAS no reduce la sanción a Suárez, este no podrá jugar ni entrenarse con el 'Barza' hasta el 26 de octubre, un día antes del duelo con Real Madrid por la liga.