El seleccionado peruano, Luis Advíncula demostró ser un padre responsable al quedarse al lado de su hijo durante su estadía en una clínica local.
El pequeño estaría padeciendo una enfermedad que lo llevó a ser internado en la clínica Limatambo. Hasta allí se hizo presente el seleccionado para acompañar a su menor hijo.
Así lo confirmó el propio jugador de fútbol tras publicar una fotografía donde se ve a su hijo acostado en la cama de la clínica.
“Cuidando a mi Negrito. Ya te vas a poner mejor, mi amor”, escribió el deportista sobre la fotografía.
Luis Advíncula no dudó en comer y quedarse a dormir en la clínica para velar por la recuperación de su hijo.