No es común ver a Lionel Messi molesto en un campo de fútbol. El argentino suele ser tolerante y muestra tranquilidad, ya sea en partidos con su selección o el FC Barcelona, pero las raras veces en que se enfada sí que lo deja notar con mucha claridad.
Y así se lució al final del encuentro entre Barcelona y Girona, de este domingo. Lionel Messi se mostró disgustado con el arbitraje de Jesús Gil Manzano y le negó al saludo al juez tras el choque en el Camp Nou.
Barcelona, que jugó la mayor parte del partido en inferioridad numérica tras al expulsión del francés Clément Lenglet, solo pudo empatar (2-2) en su campo con sus vecinos del Girona, este domingo en la quinta jornada de la liga española, alcanzando en el primer puesto de la tabla al Real Madrid, que le había superado el sábado.
En el Camp Nou, Lionel Messi abrió el marcador con un remate imparable (18), el quinto gol en esta Liga del argentino, convertido este fin de semana en el extranjero con más partidos disputados en el campeonato español (423 partidos, 388 goles, delante del brasileño Dani Alves (422 encuentros).
Pero la tarjeta roja directa recibida por Lenglet por un codazo (35) cambió el rumbo del partido y el Girona se aprovechó con un doblete del uruguayo Cristhian Stuani (45 y 51) en dos errores defensivos, antes de que Gerard Piqué, que no estuvo en su mejor forma en defensa, empatara de cabeza (63).
Con información de AFP