Lima 2019: La segunda parte, pero no menos importante

La fiesta aun no acaba. Lima 2019 tendrá una segunda parte llena de emoción, convergencia de culturas, campeones mundiales, medallistas olímpicos y mucho deporte. Este viernes 23 de agosto inician los Juegos Parapanamericanos con un show inaugural en el Estadio Nacional, que al igual que los otros dos, se vestirá de espectacularidad.

De lujo

El show está a cargo de Balich Worldwide Shows, una de las más reconocidas compañías dedicadas a la producción de espectáculos en vivo.

El director artístico, Hansel Cereza, adelantó que los paradeportistas serán parte activa de la exhibición y protagonistas con cada historia personal de superación y crecimiento.

Sin duda, tendrá un corte sobrecogedor que marcará con una característica particular esta ceremonia.

Paradeportistas

Llegarán a nuestra capital 1890 paradeportistas de 33 países que competirán en 18 disciplinas. Además, seguiremos haciendo historia porque participaremos con una delegación de 139 integrantes, la más grande de la historia del Perú en deportes paralímpicos.

Recibiremos campeones paralímpicos como el nadador brasileño Daniel Dias, quien cuenta con 14 medallas de oro. O también el ciclista estadounidense Joe Berenyi, cuatro veces medallista paralímpico. También arribará el tenista en silla de ruedas argentino, Gustavo Fernádez, quién es bicampeón panamericanos de Guadalajara 2011 y Toronto 2015.

La representación peruana tendrá como abanderada a Angélica Espinoza, quien es una parataekwondista, reconocida como la paradeportista revelación del 2017 y ganadora en múltiples certámenes deportivos.

Legado

Nuevamente hablaremos de este punto. Todas las sedes donde se desarrollarán las competencias cuentan con la necesaria accesibilidad para personas con discapacidad. Será un legado en infraestructura importantísimo para el crecimiento del deporte adaptado.

No obstante y como en todo momento desde que inició este evento, nos toca a la ciudadanía participar activamente. Seguir apoyando y capacitándonos para hacer confortable la estadía de las delegaciones.

En cada enfrentamiento podremos percibir historias de resiliencia y sobreposición ante la adversidad. Las mismas que dejarán en cada uno de los espectadores una reflexión a modo de sensibilización.

En una ciudad como Lima, que así como crece, cada vez es menos inclusiva, un evento como este nos debe concientizar e impulsarnos a mejorar. Si no es así, habremos fallado.