Desde el Mundial de México 1986, Estados Unidos no dejaba de participar en el máximo certamen de selecciones de fútbol. Quedar eliminado repercutirá las ganancias de los patrocinadores del Mundial Rusia 2018.
En la última fecha de las Eliminatorias de la Concacaf, la selección de Donald Trump perdió 2 a 1 contra Trinidad y Tobago en Centro América. Un resultado que no esperaban los expertos del balompié mundial.
Los estadounidenses, al no ver a su selección en Rusia, podría arruinar los planes de la cadena Fox Sports, que pagó más de 400 millones de dólares por los derechos nacionales para las transmisiones en inglés de las dos próximas Copas del Mundo. Por su parte, Telemundo decidió invertir 600 millones de dólares por transmitir los partidos en español, según informa El Comercio.
Algunos de los clubes europeos más importantes, como FC Barcelona y AS Roma, también están invirtiendo para atraer a los hinchas estadounidenses.