Cuando la sangre llama, uno lo deja todo. Cristian Villagra, carrilero del Atlético Tucumán, es muestra de ello. El defensor argentino es claro ejemplo que por la familia se hacen sacrificios
El futbolista estuvo fuera de las canchas y se perdió el inicio de la Copa Libertadores por donar parte de su médula ósea a su hermano, quien padece leucemia.
"Soy el único familiar compatible. No dudé un segundo en ser donante para ayudar a mi hermano. En una situación así no se puede dudar. Me llena de orgullo poder ayudar a mi hermano. También a uno lo deja tranquilo como ser humano", manifestó Villagra a la prensa argentina.
El zaguero, quien ya se encuentra recuperado, también se mostró agradecido con su club por dejarlo ayudar a su hermano, quien salió airoso de la operación.
“Gonzalo está bien, un poco bajón por la quimioterapia, pero es algo normal”, resaltó el jugador tras la intervención quirúrgica.