Victoria Quispe Mamani se inspira en la Montaña de Siete Colores.
Victoria Quispe Mamani se inspira en la Montaña de Siete Colores.

Victoria teje un bolsón. Se inspira en la montaña de Vinicunca, hoy conocida mundialmente como la , prodigio mágico de la naturaleza, a dos horas en auto de Canchis, donde vive. El bolsón lo hace de fibra de alpaca bebé. Es hilado, teñido, se saca los tonos de la montaña y empieza con el tejido. Una obra fina y única.

Victoria no fue al colegio ni al jardín. Todo lo aprendió en el campo. Es quechuahablante y tiene 48 años. Es presidenta de la Asociación de Productores Artesanales de Ticllas de Antisuyo. Pero sobre todo es artesana y guardiana de la cultura textil de su comunidad en Cusco. Trabajo y tradición que han sido reconocidos por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, tras lo cual ha lanzado el portal , un sitio web en el que exhibe al mundo los procesos, técnicas y secretos detrás de sus productos, los que ofrece a través de una plataforma e-commerce.

Octavia contesta mi llamada. Es la hija mayor de Victoria y tiene 32 años. Al lado está su madre. Octavia traduce las palabras en quechua de Victoria, pero también interviene con voz propia. Viven en el campo, a cinco cuadras de la plaza de Canchis, en pleno ascenso al cerro que resguarda al poblado. Me dice que no han sufrido y que es temporada de lluvias.

Octavia radicaba en Lima, donde trabajaba en un salón de estética. En marzo de 2020 llegó de paseo por 20 días y la pandemia impidió su retorno a la capital. Pero pasó algo más. Se reencontró con algo muy profundo, el saber de su madre, la que ha viajado de generación en generación. “Por algo Dios me trajo”, me dice.

MIRA: Carlos Guerra o Tío Lenguado: “Se puede cocinar con poca plata, sin saber y cocinar alegre, feliz”

-Victoria, ¿cómo aprendió a tejer?

Casi desde los 10 años. Me enseñaron mi abuela y primas. Aprendí mirando. Primero empecé a hacer para mi uso, porque antes la gente tejía sus ropas para ellos, no se compraban ropas. Tenía que aprender sí o sí a hacer mi ropa. Pero lo primero que aprendí bien, bien fue un chumpe, que es como una faja que tiene diseños. Esa faja era para envolver a los niños.

-¿Aprendió rápido o fue complicado?

Me tomó tiempo. Lo más difícil fue aprender a hacer el diseño de doble cara. Para mi uso eran trabajos planos, así aprendí, y ya luego hacía con diseño, sobre todo cuando tuve mi bebé y tenía que aprender más.

-¿A qué edad fue madre?

A los 16 años.

La técnica de Victoria.
La técnica de Victoria.

-Octavia, la faja la hizo para ti.

Octavia (O): Sí y después la usó con el que me sigue, mi hermano.

-¿Qué recuerdos tienes de lo primero que te tejió tu mamá?

(O): La uncuña; así le llamamos a la manta que nos sirve para cargar cosas, como una mochila que no debe faltarte. También la lliclla, que es para cubrirnos la espalda por el frío.

MIRA: Ricardo Rodríguez, ingeniero: “Quizás para 2024 ya haya impresoras 3D en las casas”

-¿Por qué migraste?

(O): El hermano mayor siempre asume la responsabilidad y yo soy la mayor. Entonces, me fui a Arequipa y luego a Lima. Y todos mis hermanos crecieron al lado de ella, y todos mis hermanos son artesanos, son unos maestros, hacen cosas maravillosas. Yo he vuelto por estos tiempos de pandemia y me he acercado más a ellos. Y también gracias al proyecto que hemos ganado, me estoy involucrando más.

-¿Y ya sabes tejer?

(O): Sí, me está enseñando; ya sé hacer mitones, chalinas. Todos los hermanos llevamos ese arte de mis padres, que siempre han sido artesanos y tienen una bonita habilidad. Mi madre tiene una creatividad única.

La obra de Victoria.
La obra de Victoria.

-¿Victoria, usted solo aprendió viendo o tuvo una maestra?

Viendo más que todo a mi abuelita. Las técnicas me explicó mi prima.

-¿Sus padres dónde estaban?

Crecí en la comunidad de Ananiso, pero nací en la comunidad de Osefina. En Ananiso crecí con mi tía. Somos ocho hermanos y, como éramos varios, mis papás no podían mantener a todos. Mi tía no tenía hijos, por eso me crio.

-¿Hoy qué prendas hace?

Ponchos, chalinas, monederos, bolsos, caminos para la mesa, portalaptops. Hacemos muchas cosas. Todo lo que hago es pampaaway, que es una técnica de tejer de cintura. Se hace en piso, en cuatro estacas, con un palo, que me ayuda a ajustar los materiales; y el tullurique, que es un huesito de alpaca que sirve para sacar el diseño.

Victoria en Canchis.
Victoria en Canchis.

-Octavia, tú que has salido de Canchis y, tal vez, puedes ver con otros ojos el trabajo de tu madre, ¿por qué es importante que su tradición se conserve?

(O): Debemos mantener la tradición ancestral. Nuestros productos son trabajos hechos a mano, naturales. Mi mamá lo aprendió de su abuelita y mi abuelita de su mamá. Es un arte que llevamos en toda nuestra historia. Necesitamos resaltar más nuestra tradición y artesanía. El sueño de mi mamá siempre ha sido llegar a las personas que valoran su trabajo. Por eso hemos creado la página web y la tienda no solo para mi mamá o mis hermanos, sino porque mi mami tiene una asociación que agrupa hasta 15 personas; entonces, la idea es que esas personas también puedan trabajar y vender sus productos a través de este medio. Gracias a ello mucha gente sigue inspirándose y pensando que todavía hay una oportunidad.

-¿Y usted, Victoria, cómo se siente de llegar a más personas?

Estoy motivada. Estamos tratando de reactivarnos. Vamos a luchar para que nuestra economía se reactive. Me falta tejer algo inspirado en la montaña de mi comunidad, que tiene colores guinda oscuro, es única; haré un poncho. Pero mis sueños se están cumpliendo, estamos abriendo la tienda virtual. Y ahora quiero tener una tienda física y que todos mis hijos se involucren.

-Octavia, ya te quedas en Cusco.

(O): Estoy encantada con los trabajos que hacen mis hermanos y siento que sí necesitamos valorar y resaltar nuestro arte e historia que sembró mi madre. Es tiempo de cosechar.

MIRA: José Luis Ruiz, actor: “Representar a Mateo Pumacahua ha sido un descubrimiento”

AUTOFICHA:

- “Soy Victoria Quispe Mamani. Tengo 48 años. Nací en Osefina, en el Cusco. He tejido mucho, ya perdí la cuenta cuánto he tejido, pero mi favorita es una manta, donde cargo mis cosas. Mi papá falleció cuando yo tenía 17 años, pero mi mamá sigue viva; ella vive en Osefina”.

- “Mi papá salió del campo y se fue a trabajar a la selva. Falleció allá y no lo pudimos enterrar. Tengo nueve hijos, cuatro mujeres y cinco varones. Quienes quieren comprarme los productos que hago pueden entrar a la página web ”.

- “No solo se llevarán el producto, sino también historia, tradición y los materiales que son de productos naturales. También estamos en Facebook. Los precios están al alcance del mercado nacional. Queremos llegar a la gente que valora nuestro trabajo y queremos equiparnos en nuestro taller”.

Victoria y su obra son parte del paisaje.
Victoria y su obra son parte del paisaje.

ESTE VIDEO TE PUEDE INTERESAR

Los Maravillosos Girasoles
Los maravillosos girasoles

TE PUEDE INTERESAR